Omar Javier
19 años atrás, Rafael Garzón cumplía el gran sueño de cualquier futbolista en México: debutar en Primera División.
Un buen día del año 2001, el corazón de Rafael empezó a palpitar con la misma insistencia con la que tantas veces buscó una oportunidad en el futbol profesional.
Los latidos incrementaron su potencia.
No era para menos porque el futbolista nacido en Córdoba, Veracruz estaba por debutar en el máximo circuito con el Puebla, esto gracias a una buena oportunidad que le brindó Mario Carrillo, hoy analista de ESPN.
Después de aquella presentación vendría la confirmación como futbolista profesional y Rafael Garzón, de pronto, se encontraría instruido con la experiencia de directores técnicos, que, desde una óptica particular, le mostrarían una nueva forma de comprender este deporte que mueve pasiones.
Hombres como Gustavo Vargas, Hugo Fernández, Víctor Manuel Vucetich, Tomás Boy, Ignacio Palou y Nacho Ambriz fueron los estrategas de aquel Puebla, que durante ocho torneos cortos entre el 2001 y 2004, también contó con la participación de un joven Garzón, todo entrega y corazón.
Después vendría un retiro prematuro y repentino, mismo que fue provocado, en gran parte, por modificaciones reglamentarias, las cuales de pronto dejaron sin trabajo a centenas de jóvenes futbolistas.
Pero si en ese momento terminó el ciclo de futbolista profesional, en ese lapso también nació una nueva faceta de Garzón ligada al futbol.
Un viaje a Estados Unidos fue el primer paso de una carrera como director técnico que hoy, en plena contingencia sanitaria, se encuentra por cumplir dieciséis años de trabajo, retos y obstáculos superados.
“En Puebla me pusieron transferible y la Federación Mexicana de Futbol decidió reducir los equipos y bajar el límite de edad para jugadores de Primera A así que de pronto creo que como 400 futbolistas nos quedamos sin trabajo.
En ese momento me llegó una oportunidad de estar un verano en Estados Unidos dando mis primeros pasos como entrenador y ahora ya llevo muchos años en esto”, comentó Rafael Garzón.
Tras ese primer paso vinieron muchos más, unos en el rubro amateur y otros en el profesional, pero todos gratificantes y aleccionadores.
“Tuve la oportunidad de estar en un proyecto que me marcó como director técnico. Hicimos un equipo con jóvenes con síndrome de Down y tuvimos la oportunidad de representar a México en un evento internacional celebrado en Florencia, Italia. Esta situación me dejó mucha experiencia y es un gran recuerdo, pero espero en algún momento retomarlo.
Apenas hace unos meses fui director técnico de Lobos BUAP en la Tercera División y resultó una gran experiencia porque fue una oportunidad que busqué luego de capacitarme mucho, tomar bastantes cursos y graduarme como director técnico”.
NUEVOS RETOS
Actualmente, el director técnico Rafael Garzón se desempeña como director deportivo de CEPROF, un organismo que tiene su sede en Puebla y que está enfocado en el futbol formativo.
“Actualmente tenemos una matrícula de 30 niños y es muy interesante difundir el futbol desde un ámbito formativo, que es muy distinto al competitivo”.
MÁS SOBRE RAFA GARZÓN
Jugó para Puebla entre 2001-2004
Fue compañero de Jorge Campos
Es director técnico titulado
Actualmente es director deportivo de CEPROF
